Como empresario y dueño de tu empresa, tu objetivo principal debe ser desarrollar un negocio que se a rentable y que funcione sin depender de ti.
Si eres un micro gerente, nunca tendrás una empresa que funcione sin depender de ti.
Crea "un sistema" en tu empresa y hazlo funcionar.
Contrata a trabajadores competentes y atentos para que lo hagan funcionar.
No debes ser un supertrabajador, debes ser un supervisor
Acaba con las actitudes de "lo haré yo mismo" y "nadie lo hace tan bien como yo".
Aprende a delegar.
Contrata a un asesor experto para que te ayude con esta habilidad fundamental.
Si otra persona puede hacer algo un 80-90% tan bien como tú, deja que esa persona haga el trabajo.
No gastes tu tiempo en cosas que otras personas pueden hacer por ti.
Conoce las áreas en la que eres bueno, y delega casi todo lo demás.
Haz aquellas cosas que sólo tú puedes hacer como empresario y dueño de tu empresa y delega el resto a otros.
Asegúrate de delegar, no de omitir tareas o desecharlas.
Mantente en contacto con las personas a las que se han asignado esas tareas, y supervisa su progreso.
Adopta la actitud de que tu tiempo es valioso
Aprende a discriminar entre las distintas actividades.
Antes de realizar una tarea, pregúntate: "¿Esta tarea aumenta la reantabilidad de mi empresa, reduce los costos, mejora la satisfacción del cliente o ayuda a construir una empresa mejor?"
Si no es así, descarta la tarea o delégala.
Si la tarea no vale 200 dólares la hora, busca a otra persona, interna o externa, que la haga a una tarifa más barata.
Debes darte cuenta de que tus pensamientos y acciones como empresario y dueño de tu empresa (crear sistemas, liderar, planificar, responsabilizar a la gente, entrenar a otros líderes, etc.) valen "por lo bajo" 200 dólares por hora.
Si no lo haces, nunca aprenderás a ser eficaz en la delegación.
No puedes delegar lo que no es específico
así que asegúrate de que las tareas están bien definidas...
Luego sal del camino de tus directivos y trabajadores.
No te entrometas; supervisa.
En lugar de hacer su trabajo por ellos, ayúdales a aclarar sus funciones, responsabilidades, objetivos y tareas, y simplemente hazles responsables de que hagan las cosas.
Una vez que demuestren competencia y carácter, da a tus empleados la autoridad para hacer que las cosas sucedan.
Deja que hagan su trabajo
Deja que aborden los proyectos por su cuenta y que acudan a ti sólo cuando necesiten más orientación.
En lugar de micro gerenciar el proceso, gerencia por resultados.
Si no pagas un salario adecuado, ¡ten cuidado!
Si pagas maní, no te sorprendas si solo llegan los monos.
Si pagas mal harán un mal trabajo.
Eres empresario para crear puestos de trabajo, no para trabajar
El liderazgo consiste en hacer menos y pensar más: planificar y supervisar lo que hacen los demás.